Enfocando la comunicación desde una perspectiva temporal, observamos que una de las características más importantes de nuestro momento actual, es la velocidad. Una época marcada por la aceleración en todos los ámbitos de nuestra vida, por el aumento en la rapidez de los procesos o de nuestras acciones.
La variabilidad en el comportamiento de las personas es un hecho innato e indiscutible, pero parece que nos encontramos en un momento histórico en el que los cambios se suceden en tiempo récord. Esto es algo que para los que amamos estudiar los mercados, nos apasiona.
Aunque por otro lado esta velocidad, complica la posibilidad de realizar estrategias dedicadas a ese target que puede resultar tan cambiante. Cuando nos enfrentamos al reto de planificar la comunicación, siempre orientada a un segmento objetivo y que además transmita los valores del producto o marca que ofertamos, necesitamos invertir horas de esfuerzo en adecuar y maximizar el efecto de nuestro mensaje. Sigue leyendo Perdidos en el tiempo